Vistas de página en total

jueves, 27 de noviembre de 2014

Al borde de nada

Dicen que lo que no te mata te hace más fuerte, pero la verdad, sigo esperando el momento en el que me fortalezca o en el que muera gracias al último golpe, quizá ese fue nuestro plan, rompernos en mil pedazos sin posibilidad de reconstrucción, bastante daño hiciste y creo que todavía no ha llegado el día en el que pueda mirarte a los ojos y no echarme a llorar: por que sigo esperando que me mates, o que me hagas más fuerte, mas parece que ese momento esta lejano todavía.
Claro que he intentado superarte, saltarte, subirme a una torre, gritar que no me importas, pero ¿quien me iba a creer si realmente no me creo ni yo? En realidad, ahora que me paro a pensarlo, me has intentado matar más de una vez, mirandome y justo en ese preciso instante era cuando mi corazón dejaba de latir, unos segundos despues volvía a la rutina para responderte con otra mirada llena todavia con más fuerza aún, si se puede, claro. Pero siempre me dejas al abismo: al abismo del pecado, del infierno, de la muerte (esa que espero proviniente de tus labios) Pero claro, como ibas a creer a una chica que lee poesía, si te intenté desvelar mil y una veces entre mentiras la verdad de mi cabeza, que no se por qué escribo esto, si realmente se que no lo vas a leer, Te perdí hace un tiempo, Pero por un par de instantes sentí tu corazón colgando en mis manos. La pena: solo fueron imaginaciones de una chica deseosa de encontrarse contigo y ser capaz de decirte todo lo que esta siendo capaz de escribirte ahora.
Hazme un favor... mátame, empújame al abismo que caiga de una vez, pero no me vuelvas a dejar al abismo de nada, por que si no será entonces, cuando yo daré el primer paso.
Sugus de limón

No hay comentarios:

Publicar un comentario