No puedes fiarte de tu cabeza, ya que no siente lo que tu corazón y aunque esten encerrados en el mismo cuerpo no tienen porque tener la misma opinión. Hay veces que decimos que deseamos con todo corazón hacer algo, pero en cambio nuestra cabeza dice que no es buena idea. Pero no puedes evitar arriesgarte, por que ¿y si sale bien? Y entonces te arriesgas, lo das todo por ese 'algo' que te tiene noches en vela, o clases sin poder concentrarte, solo por una puta sonrisa. Pero tu cabeza dice no lo hagas, sabe como va a acabar esto, pero sigues dando pasos en este camino muy transitado por todos, pero que pocos llegan a su meta.
Pero entonces recordé lo que leí una vez: ''No confíes demasiado en vuestro corazón, por que os fallará.'' ¿Y qué pasó? Que me falló
Sugus de limón
No hay comentarios:
Publicar un comentario