No se que día decidí que me gustabas, pero hoy me siento valiente, y a la vez cobarde de compartir estos sentimientos con el resto del mundo (excepto contigo).
Día tras día veo como el mundo se me cae encima: por una sonrisa de esas tan maravillosas, que me hacen suspirar, por una puñetera mirada de complicidad ¿Y el significado? No lo se, solo se que es tu culpa que yo este así, aquí, escribiendo y desahogando que me matas con la indiferencia. Que el mayor remedio de todos los tiempos para la melancolía, la tristeza o la añoranza -la música- solo me sirve para tener mas ganas de acercarme a ti, y menos para separarme.
Por que no se que día decidí que sería valiente, valiente para admitir que me he pillado por alguien que no entraba en mis planes, ni me esperaba que entrara en mi vida jamás...
Sugus de limón
No hay comentarios:
Publicar un comentario